Desde noviembre de 2012 hasta febrero de 2013
La próxima exposición temporal programada por el Museo Carmen Thyssen Málaga tendrá como protagonista la obra de Hermen Anglada-Camarasa, uno de los pintores españoles más importantes de finales del siglo XIX y principios del XX. La exposición, organizada en colaboración con la Obra Social «la Caixa», está comisariada por Silvia Pizarro, nieta del artista, y Lourdes Moreno, Directora artística del Museo Carmen Thyssen. La muestra estará compuesta por alrededor de 55 obras que plantearán un recorrido a través de la representación femenina en la pintura de este autor. La selección de obras, procedentes en su mayoría de la Colección Hermen Anglada-Camarasa de la Fundación «la Caixa», así como de otros prestatarios y colecciones, estará acompañada por una selección de dibujos preparatorios relacionados con dichas obras, y pertenecientes también a la colección de la Fundación «la Caixa».
La Colección Hermen Anglada-Camarasa de la Fundación ”la Caixa” se compone de 328 obras y 194 objetos personales que formaban parte de la colección del artista. En 1988 la Obra Social ”la Caixa” adquirió a los herederos del pintor una amplia representación de pinturas y dibujos. Desde hace años, la entidad organiza exposiciones itinerantes para dar a conocer la obra del artista. Asimismo, CaixaForum Palma se ha convertido en un centro de estudio y divulgación de la obra de este pintor, donde, además, desde 1993 existe un espacio permanente de exposición de su obra. En el año 2003, la Colección Hermen Anglada-Camarasa de la Fundación ”la Caixa” fue declarada Bien de Interés Cultural por el Ministerio de Cultura.
Hermenegildo Anglada-Camarasa (Barcelona, 1871-Port de Pollença, 1959) es uno de los pintores relevantes de la primera década del siglo XX. Tras un período inicial de formación en Cataluña, en 1894 marchó a París, con el entusiasmo y la determinación de ampliar conocimientos, y tras unos primeros años difíciles, su figura empezó a ser reconocida por artistas y críticos de prestigio también en las principales ciudades de Europa, convirtiéndose en un renombrado artista internacional.
Las pinturas de su etapa parisina, realizadas bajo los efectos de la luz eléctrica, muestran los ambientes nocturnos de la Belle Époque en la capital, en los que la mujer es la protagonista, envuelta en el lujo aparente y la voluptuosidad, dando lugar a obras que se cuentan entre las más creativas y sobresalientes de su producción. Anglada-Camarasa inicia así una exitosa carrera con una sucesión de exposiciones en distintas ciudades europeas, que continuaría más adelante en el continente americano. No en vano ésta fue su etapa más creativa y sobresaliente, captando de manera personalísima y original los detalles de la vida nocturna y sus personajes. Su retirada a Mallorca en 1914 supuso un cambio importante en su producción, sobre todo en cuanto a la temática predominante, que pasó a ser el paisaje, aunque no por ello abandonaría el que había sido su motivo principal, la figura femenina.